En lo alto de un promontorio situado junto a la autovía A-31, a unos 15 km al sureste de Albacete, se encuentra esta joya medieval, desde la cual se domina buena parte de la llanura manchega, tal y como atestiguan unas seguidillas de la región:
"Desde el Alto Chinchilla
se ve La Roda,
Albacete y Almansa,
la Mancha toda"
Chinchilla de Montearagón y su castillo están situados en un importante cruce de caminos desde la antigüedad . Forma parte de una ruta de castillos que transcurre por un corredor natural que une el sureste y levante con el centro peninsular y Andalucía. Algunos ejemplos de esto son: en la provincia de Cuenca, el castillo convento de Uclés, el Castillo de Garcimuñoz, el Torreón de Cervera del Llano y el castillo de Honrubia; en la provincia de Albacete, los castillos de Chinchilla y Almansa; en Alicante, los castillos de Sax, Villena, Elda, Petrel, Novelda y el de Santa Bárbara en la capital de provincia; y en Valencia, los castillos de Montesa y de Játiva.
El castillo de Chinchilla fue construido en el siglo XV por el Maestre de la Orden de Santiago y Marqués de Villena, Juan Pacheco, en el lugar donde antes hubiera una alcazaba árabe conocida como “Xerif El-Edrisi”.
Adaptado a la orografía del terreno, es de planta ovalada. En su interior la vida se articulaba en el gran patio de armas, en cuyo centro se alzaba la torre del homenaje, de planta cuadrada y muros de sillería de más de 33 metros de altura por 9 metros de lado. Compuesta de dos estancias superpuestas y una terraza almenada con matacanes. Al interior se accedía por una escalera exterior que subía hasta una sala situada en el primer piso, llamada Sala de los Secretos, con bóveda nervada de estilo gótico. La torre asumió un uso residencial y de poder feudal.
Dispone el castillo de torreones de planta circular en los cuales se abren bocas de tiro o troneras. Realmente espectacular es el enorme foso que rodea toda la edificación, tallado en la misma roca, cuenta con 10 metros de ancho por 6 de profundidad y aumenta la altura de sus ya elevados muros al dotarlos en su arranque de un talud inclinado.
La puerta de entrada está formada por un arco de medio punto adovelado, flanqueado por dos magnificas torres circulares con dos cornisas, la superior el doble de gruesa que la inferior. Sobre ambas torres se encuentra tallado el escudo del Marqués de Villena.
Numerosas batallas son las que se han librado frente a sus altísimos y fuertes muros, desde las diferentes escaramuzas acaecidas entre Isabel la Católica y el Señorío de Villena, en el siglo XV, hasta la Guerra de Independencia, donde las tropas francesas, tras apoderarse del castillo en 1812, volaron la torre del homenaje.
El más famoso de sus huéspedes, fue César Borgia, hermano de Lucrecia e hijo predilecto del Papa Alejandro VI, a quien el Gran Capitán trajo preso a España, en 1504, por orden de Fernando el católico. Desde entonces y hasta 1950, el castillo ha sido usado como prisión en numerosas ocasiones.
En la actualidad, el castillo de Chinchilla está siendo rehabilitado con el fin de convertirse en Parador Nacional. El proyecto contempla incluso la recuperación de la desaparecida torre del homenaje.
Especial interés tienen también las casas-cueva, que aún hoy siguen construyéndose a los pies del castillo, y el centro histórico de Chinchilla, excelentemente conservado.
Fuentes:
1 comentarios:
¡¡Precioso!!
No hay lugar que se te resista por la zona ¿eh?
Un saludo
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