"Gerda sintió multitud de huesos de sus pies esparcidos por el aire como grava. Fósforo puro. El cráneo de él reposando contra sus costillas, los metacarpios de su mano izquierda dentro de la mano derecha de ella. El hueso de la pelvis unido a su tráquea por la máxima intimidad. Fosfato cálcico. Fue entonces cuando se dio cuenta de que todo lo vivido cabía en el relámpago de una milésima del firmamento, porque el tiempo no existía."
A mediados de los años 30 llega a España el fotógrafo André Friedmann, más conocido como Robert Capa. Durante la contienda española Friedmann forjará la leyenda del reportero de guerra. Su lema: "si tus fotos no son lo bastante buenas es que no te has acercado lo suficiente". La historia de Esperando a Robert Capa aúna amor, guerra y fotografía. Se centra en los años que vivieron en común el famoso fotógrafo y Gerda Taro, desde su encuentro en París, en 1935, hasta la muerte de Gerda, tras la batalla de Brunete, en julio de 1937. La novela se compone de dos partes claramente diferenciadas. Una primera parte que transcurre en París, en ese París bohemio del período de entreguerras, de los cafés, del surrealismo... Y una segunda parte que transcurre en la guerra civil española, focalizándose principalmente en el Madrid de la resistencia.
Escrita por la atractiva Susana Fortes y ganadora del Premio de Novela Fernando Lara 2009, Esperando a Robert Capa, comienza a forjarse en la mente de la escritora tras el hallazgo en México, en enero de 2008, de tres cajas con 127 rollos de negativos y más de 3.000 fotografías inéditas de la guerra civil española, pertenecientes a Robert Capa, Gerda Taro y David Seymur, Chim. Según la propia autora, fue una de las fotografías publicada por The New York Time lo que le empujó a escribir la novela: una fotografía muy tierna y sugestiva de la joven Gerda Taro en una cama estrecha de una habitación de hotel, dormida con el pijama de Robert Capa.
En la novela se entremezclan realidad y ficción con un estilo muy cinematográfico, por lo que no es de estrañar que Michael Mann, director de películas tan conocidas como El último mohicano, Enemigos públicos o El dilema, se haya fijado en el tremendo potencial de Esperando a Robert Capa, adquiriendo los derechos cinematográficos de la novela el pasado mes de septiembre. Quizás, en un futuro no muy lejano, podamos ver en la gran pantalla esta historia de amor, con Johnny Depp en el papel de Robert Capa, a pesar de las consabidas desavenencias entre Depp y Mann. Un drama bélico, sobre la guerra civil española, made in Hollywood.
"Un miliciano baja corriendo la ladera de una loma cubierta de rastrojos. La camisa blanca remangada por encima de los codos, la gorra de soldado echada hacia atrás, un fusil en la mano y tres cartucheras de cuero alcoyano en la bandolera. El sol de las cinco de la tarde proyecta su sombra alargada hacia atrás. Un pie ligeramente levantado del suelo. El pecho al aire. Los brazos en cruz. Cristo crucificado. Click."
En la novela se entremezclan realidad y ficción con un estilo muy cinematográfico, por lo que no es de estrañar que Michael Mann, director de películas tan conocidas como El último mohicano, Enemigos públicos o El dilema, se haya fijado en el tremendo potencial de Esperando a Robert Capa, adquiriendo los derechos cinematográficos de la novela el pasado mes de septiembre. Quizás, en un futuro no muy lejano, podamos ver en la gran pantalla esta historia de amor, con Johnny Depp en el papel de Robert Capa, a pesar de las consabidas desavenencias entre Depp y Mann. Un drama bélico, sobre la guerra civil española, made in Hollywood.
"Un miliciano baja corriendo la ladera de una loma cubierta de rastrojos. La camisa blanca remangada por encima de los codos, la gorra de soldado echada hacia atrás, un fusil en la mano y tres cartucheras de cuero alcoyano en la bandolera. El sol de las cinco de la tarde proyecta su sombra alargada hacia atrás. Un pie ligeramente levantado del suelo. El pecho al aire. Los brazos en cruz. Cristo crucificado. Click."
4 comentarios:
Supongo que sabes que hay una teoría que dice que la foto del miliciano está trucada, que estaba posando... Teorías.
Teresa: Lee "La noche de los tiempos", de Muñoz Molina.
Saludos.
Zanobbi, conozco la teoría. Lo último que he leído al respecto es que la posición de la mano izquierda del miliciano, la que puede verse bajo su pierna izquierda, revela que el miliciano estaba muerto en el momento de tomar la fotografía...
Este lo tengo en mi lista de pendientes.
Interesante blog descubierto a través de Atrápalo,donde compartimos espacio esta semana.
Un saludo.
Bienvenida, Lola, a A tu aire.
Acabo de enterarme de lo de Atrápalo, je je!
"En A Tu Aire encontramos un poquito de todo pero sobretodo, mucha cultura. ¿Habías oído hablar de La inserrucción que viene? Es la biblia de los antisistema y en A Tu Aire podrás descargártela. Además, Ingelmo tiene un cuentakilómetros en el que están todos sus viajes ¡no está nada mal!"
Publicar un comentario